Esos otros que somos

sábado, 22 de mayo de 2010

Si todos fuéramos como yo,
se alejarían de todos y hablarían con nadie.


Si todos fuéramos como M.,
los insultos perderían sentido.


Si todos fuéramos como A.,
el compromiso sería un albur.


Si todos fuéramos como L.,
las crisis sociales serían intensas pero olvidadizas.


Si todos fuéramos como V.,
seríamos dicotomías y variaciones emocionales.


Si todos fuéramos como F.,
veríamos a los otros como otros no tan otros.


Si todos fuéramos como J.,
no veríamos a los otros como otros, sino como formas calculables.


Si todos fuéramos como J.,
los compromisos serían promesas no cumplidas.


Si todos fuéramos como ella,
nos veríamos como composiciones y escalas tonales.


Si todos fuéramos como M.,
veríamos a los demás como extranjeros.


Si todos viéramos a los otros como los demás nos ven, seríamos menos ajenos y más respetuosos de los otros, sus otredades y serían, ya no otros, el resto de nosotros; los otros yo.

Ser los otros por una vez y darnos cuenta que no somos tan ajenos a los demás… Toda diferencia de preferencias es sutileza, no hay bueno ni malo, todo es circunstancial; hay que construir la circunstancia donde seamos buenos.

3 comentarios:

La Lluviedad dijo...

siempre atrapados en el yo



rrr dijo...

cada cabeza es un mundo :c



Alejandro Rivera dijo...

me perdí en las otredades de los otros y nosotros =S