DE SETSO Y SOY ÑOÑA

Todos aquí sabemos que soy súper ñoña, no es ninguna novedad. Y en estos días un tema que me ha dado vueltas en la cabeza ha sido precisamente ese del sexo y la promiscuidad.

No es que yo diga no la cochinada, o que virgen hasta el matrimonio ni nada así, no me espanto, cada quien puede hacer con su cuerpo y con su sexualidad lo que le venga en gana y es muy respetable, pero sí he pensado que muchas veces lo tomamos muy a la ligera, creo que el sexo va más allá de sentir chido y venirte mil cien veces en una noche, creo que es un tema que conlleva mucho la intimidad y la confianza de la pareja, y, ¿Por qué hablo de confianza, mi querido lector? Bueno, por que no me parece que sea algo de nada más me gustó y me l@ voy a echar, creo que cuando se tiene sexo con alguien con quien compartes cariño, confianza y fidelidad, no hay algo más chingón. Aunado a esto, está el hecho de las enfermedades de transmisión sexual, el sida, y por supuesto, la culpa moral. Como les he dicho, tampoco se trata de que todos nos volvamos monjas y monjes y ya nunca más hagamos cochinadas hasta el fin de los tiempos, no, sino que hablo de saber llevar tu sexualidad de manera segura y sobretodo responsable. Claro que también luego está la parte de que sólo hay una vida, que hay que disfrutar y todo eso, pero al menos a mi este tema si me parece importante compartirlo con alguien por quien sientes algo o que hay un cariño de por medio.

¿Ustedes qué piensan? ¿Merezco ser quemada en la hoguera por ñoña?